Tras enfocarse en las últimas dos semanas en la segunda revisión técnica del programa con el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Gobierno avanzará ahora con el Club de París por la deuda de 2.400 millones de dólares que el país tiene con el foro de naciones acreedoras.
Fuentes cercanas al ministro de Economía, Sergio Massa, señalaron que las conversaciones ya comenzaron y que, más allá de que aún se espera la aprobación formal del staff agreement, la nueva meta es tener cerrado el acuerdo con el Club del París antes de la Asamblea anual del FMI, que se desarrollará durante la semana del 10 de octubre en Washington.
«Las negociaciones informales con el Club ya comenzaron», indicaron las fuentes.
En el Palacio de Hacienda están satisfechos con los logros alcanzados durante la visita de siete días que el ministro realizó a Estados Unidos, donde mantuvo encuentros con funcionarios del Departamento de Estado, empresarios, directivos de organismos multilaterales y del Tesoro.
La fecha tentativa para cerrar el acuerdo con el Club de París sería fines de septiembre.
La semana pasada, la titular del FMI, Kristalina Georgieva, destacó el «compromiso muy fuerte» de la Argentina con el programa económico, elogió al equipo de Massa y dijo que era una «buena señal» que ahora hubiera un enfoque en el que todo el Gobierno apareciera involucrado en la implementación del plan económico.
«Salí con la sensación de que tenemos un socio con el que podemos trabajar bien», indicó la directora gerente del Fondo Monetario luego de la reunión que mantuvo el lunes pasado con Massa.
«Salí con la sensación de que tenemos un socio con el que podemos trabajar bien», indicó la directora gerente del Fondo Monetario luego de la reunión que mantuvo el lunes pasado con Massa
«El ministro Massa vino junto con el gobernador del Banco Central (Miguel Pesce) y las personas claves de su equipo y esa es una buena señal, que tenemos un enfoque de todo el Gobierno para implementar el programa. Estamos en un momento en el que, él reconoció sobriamente, yo reconocí sobriamente, que los problemas que enfrenta la Argentina son muy significativos y al tope de la lista está la inflación, que es devastadora especialmente para los pobres de la Argentina», describió Georgieva.
De esta forma, la titular del Fondo puso de relieve la unidad existente en el equipo económico y en el plano político tras la asunción de Massa al frente del Palacio de Hacienda.
En las conversaciones técnicas entre los funcionarios del Ministerio y el staff del FMI se terminaron de pulir los detalles del proyecto de Presupuesto 2023 que se envió en las últimas horas del jueves al Congreso.
Según los principales detalles de la iniciativa, el Gobierno prevé una inflación de 94,5% para 2022 y de 60% para 2023.
Para el próximo año proyecta un crecimiento de 2,5% de la economía y un déficit de 1,9%, en línea con lo acordado con el Fondo.
En lo que respecta a la difusión del staff agreement, el propio FMI reiteró -en conferencia el jueves último- que el documento se conocerá «en los próximos días» y que, como es habitual, el Board lo suele analizar un par de semanas después, es decir que probablemente la eventual aprobación sea en las primeras semanas de octubre.
Es decir, la Argentina deberá afrontar el pago por cerca de 2.600 millones de dólares el próximo 21 y 22 de septiembre, antes de que lleguen los desembolsos del Fondo por 4.100 millones de dólares, luego de la aprobación del directorio.